El fraude fiscal, también conocido como «fraude de ley», es una conducta ilegal que consiste en no declarar o declarar de manera incorrecta ingresos, gastos o activos con el objetivo de evadir impuestos o reducir el pago el pago de los mismos. Puede ocurrir a través de la ocultación de ingresos, la inflación de los gastos, la declaración incorrecta de los activos o la manipulación de las deducciones permitidas.
El fraude fiscal puede ser cometido tanto por individuos como por empresas. Puede ser llevado a cabo mediante la falsificación de documentos, la presentación de declaraciones falsas o la ocultación de información relevante. Es importante mencionar que, el fraude fiscal es considerado un delito grave y puede llevar a multas, sanciones y, en casos graves, a la prisión.
Además de las consecuencias legales, el fraude fiscal también tiene un impacto negativo en la economía en general ya que afecta a la recaudación de impuestos y puede causar desequilibrios en el presupuesto del Estado. También puede dar ventaja competitiva a las empresas que evaden impuestos en comparación con las que cumplen con sus obligaciones fiscales.
Existen diferencias entre el fraude fiscal y la evasión fiscal, la evasión fiscal es el uso legal de las leyes fiscales para reducir la carga fiscal, mientras que el fraude fiscal es la violación intencional de las leyes fiscales. Por eso, es importante conocer las leyes fiscales y cumplir con las obligaciones legales.