Una empresa offshore es una compañía que está registrada en un país diferente al en el que realiza su actividad económica principal. Estas empresas pueden ser utilizadas con fines legítimos, como reducir costos de operación, proteger activos, o para facilitar transacciones comerciales internacionales. Sin embargo, también pueden ser utilizadas con fines ilícitos, como evadir impuestos, ocultar activos, o facilitar actividades ilegales como el lavado de dinero.
Las empresas offshore están registradas en países conocidos como paraísos fiscales, que son aquellos que ofrecen un régimen tributario favorable, protección de la privacidad y falta de regulación financiera. Estos países suelen tener leyes que garantizan la confidencialidad de la información de los titulares de las empresas, y no requieren que estas empresas realicen sus actividades económicas dentro de sus fronteras.